El Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas manifestó a Bolivia su preocupación por la gran cantidad de casos de violencia contra las niñas que han afectado al país altiplánico, e instó a las autoridades a tomar medidas urgentes para proteger a las menores.
Las cifras dan cuenta que existe un elevado número de casos de violación, embarazos y maternidad infantil, explotación sexual y prostitución de menores. Para abordar esta problemática el Comité recomienda a Bolivia implementar políticas públicas a nivel nacional para poner fin a esta situación que presenta una mayor incidencia en las zonas rurales, mineras y turísticas del país.
En un comunicado, el Comité señaló que “(..) la definición legal de violación no se refiere a la falta de consentimiento para las relaciones sexuales, por lo que las autoridades deben adecuar esta definición a los estándares internacionales para que el delito no prescriba y que se tomen en cuenta las relaciones de poder al evaluar el consentimiento de las relaciones”.
Indicó que se debe poner especial atención a los niños indígenas y afrodescendientes por ser una población especialmente vulnerable que suele sufrir una mayor violación de sus derechos. Están en constante riesgo de ser explotados y de padecer carencias a raíz de su dificultad para acceder a bienes y servicios básicos. En este sentido, se recomienda al Estado tomar medidas financieras y legislativas para cautelar sus derechos y garantizar su acceso a la protección social.
Finalmente, la Comisión llamó la atención a Bolivia por los más de 83.000 casos documentados de menores de entre 5 y 13 que trabajan más de 40 horas semanales en condiciones paupérrimas. Advierte que estos son constitutivos de trabajo forzado infantil.